La fragmentación de una crisis de valores a nivel mundial, en donde la ética, la transparencia y el compromiso con la comunidad, pasaron a un segundo plano, ha llevado a la esfera global a confeccionar una empatía distinta con la sociedad. Si el debate público se vuelca hacia una normatividad más exigente, las compañías tendrán que planear sus estrategias de negocio bajo un nivel regulatorio más estricto.
Es esencial, ante el escenario económico actual, fomentar la especialización del capital humano ya que sin ellos no hay construcción de tejido sano y estable dentro de la empresa.
Un punto muy importante es la necesidad de converger e innovar con el fin de poder obtener un retorno que facilite el liderazgo de las empresas. Hay que conseguir algún tipo de retorno para la misma, ya sea económico, de reputación o de retención de talento. Es la forma de garantizar la continuidad de la Responsabilidad Social Corporativa en tiempos de crisis económica.
Sistematizar la actividad de la empresa minimizando riesgos y mejorando la eficiencia empresarial mediante políticas de Responsabilidad Social Corporativa, aumenta la rentabilidad económica de la misma. Invertir en estrategias a corto plazo, implica romper con el proceso de multiplicación de acciones sociales.
Por tanto, en 2009 las empresas deberán ser promotoras del desarrollo social y comprender que el mercado de la Responsabilidad Social será su aliado clave para impulsarlas en su crecimiento hacia 2009.
La complicidad de la sociedad con una Responsabilidad Social que se ha institucionalizado debe marcar diálogos entre actores públicos y privados para delinear un punto de fortalecimiento a mediano y largo plazo: una respuesta coordinada con cara hacia la crisis.
¿El proceder en los próximos años? La sagacidad para elegir cómo y en dónde invertimos en el capital humano, cómo retenemos al talento, hasta qué punto podremos regular al sector financiero, cómo interactuamos con otras economías, de qué manera convenimos con los espacios globales en la visión sustentable, cómo confluimos para lograr el compromiso real de las empresas, de los gobiernos, de las instituciones y de los líderes con una Responsabilidad Social a largo plazo.
Las empresas en México requieren de una mayor especialización para su manejo de Responsabilidad Social. El 2009 exigirá a las empresas esta especialización que genere un mayor nivel de compromiso con la sociedad. La actual crisis económica, rodeada de una diversidad de elementos éticos y de transparencia, es una gran oportunidad para que la Responsabilidad Social Corporativa resulte fortalecida.
* * Este artículo fue publicado originalmente en el Suplemento de Responsabilidad Social del periódico "El Economista"
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